En Cinnia, el compromiso con la responsabilidad social y ambiental se manifiesta en cada rincón de nuestras instalaciones, que en respuesta a los desafíos contemporáneos que abarca la sociedad, han sido cuidadosamente diseñadas para ser un faro de excelencia en gestión sostenible. Aquí, convergen elementos clave que abarcan desde la integración en el entorno natural hasta la optimización de recursos como la energía y el agua.
La creación de zonas ajardinadas exteriores e interiores, en planta y cubierta, refuerza la integración de la instalación en el entorno natural.
En el tratamiento de la energía, se ha puesto especial énfasis en el aprovechamiento de los recursos naturales para la obtención de las diferentes condiciones ambientales. Salud, ecología, economía y sostenibilidad se obtienen a través de un elaborado diseño y una gestión optimizada.
La orientación del edificio, cara sur, optimiza el recurso del sol para dar iluminación natural interior y generar el calentamiento de las instalaciones. Hay una abundancia de luz natural que penetra a través de los diferentes recursos dispuestos como la fachada acristalada. Esta permite la entrada de luz natural correctamente proyectada gracias a los diferentes sistemas de control.
El tratamiento del agua es un recurso fundamental de estas instalaciones, partiendo de la base de considerar la correcta gestión del ciclo del agua como pilar básico de la filosofía empresarial. Los recursos utilizados para alcanzar estos objetivos se basan en la recogida de las aguas para su depuración y reutilización. Se ha diseñado un sistema de cubierta vegetal, que a su vez contribuye de forma notable en el aislamiento térmico interior, para la recogida, almacenamiento y conducción de las aguas pluviales hacia un circuito donde se produce la depuración de éstas para su posterior reutilización.
Para el almacenamiento de las aguas se han instalado dispositivos para obtener un ciclo de reutilización completo. Las instalaciones constan de un sistema de depósitos subterráneos de 80.000 litros de capacidad total, para depositar las aguas pluviales recogidas en todo el ciclo.
Para la depuración de las mismas, se utiliza un sistema de filtro verde que consiste en la aplicación de un caudal controlado de agua residual sobre la superficie del terreno con el fin de reducir la materia orgánica presente una vez superadas las fases de pretratamiento y tratamiento primario. Este proceso biológico se realiza mediante la acción conjunta del suelo, los microorganismos y las plantas, una triple acción, física, química y biológica.
Todo el sistema que envuelve el edificio, proporciona una integración total con el medio natural.
Se han dispuesto también, en las diferentes salas interiores, zonas verdes con plantas para proporcionar una mejor calidad del aire e integración con el entorno.
En Cinnia, la sostenibilidad no es solo un propósito, es una filosofía arraigada en cada faceta de nuestras instalaciones. Desde la estrategia de orientación del edificio para aprovechar la luz natural, hasta el enfoque innovador en el tratamiento del agua como recurso fundamental, cada detalle ha sido cuidadosamente planificado, destacando nuestro compromiso en la gestión sostenible.